6/9/10

El Pentágono estrecha su control de la Administración Obama y la comunidad de inteligencia.

El nombramiento del general retirado Gen. James Clapper como director de inteligencia nacional (DNI) demuestra la enorme influencia del Pentágono sobre el Presidente e indica que existen escasas posibilidades de reformas genuinas en la comunidad de inteligencia.
       Obama ha entregado a generales retirados y a militares de carrera posiciones claves de Asesor en Seguridad Nacional, las embajadas de Afganistán y Arabia Saudí y el DNI   La Secretaria de Estado,  Hillary Clinton se propone nombrar a un general retirado quien fuera responsable de operaciones especiales en Afganistán como coordinador de contra-terrorismo del Departamento.  A estos militares de carrera no se les conoce por su  capacidad de pensamiento estratégico sino por su entrenamiento para evaluar y asesorar acerca de escenarios extremos en situaciones geopolíticas.  No es de extrañar que Obama cuente con tan pocos sucesos exitosos en la arena diplomática, que el Departamento de Estado continue subutilizado y ejerza tan poca influencia y el enorme presupuesto del Pentágono permanezca inalterado. 
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